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    Cuando decimos 'crianza' para mí automáticamente hay 3 cosas que se ponen sobre la mesa


    • Rutinas
    • Límites
    • Inteligencia Emocional

     

    Y te voy a decir un elemento de cada uno

     

    Rutinas: son momentos, no horarios y ojalá se transformen en rituales

     

    Límites: son esenciales, dan seguridad y todas las personas hacemos berrinche,

    porque todos tenemos necesidades instafisfechas.

     

    Inteligencia Emocional: mi gran lema: primero necesitas la tuya para luego asisitir alguien más. 

     

    Desde que abordo el campo emocional en mis acompañamientos hablo de Inteligencia

    y no de Educación Emocional.

    Porque las emociones no se pueden, y al menos yo no quiero, educarlas.


    Es una respuesta química con lo cual igual sería complejo; lo que educamos

    es el comportamiento y a partir de eso es que nos volvemos cada vez más

    inteligentes emocionalmente. 

     

    Entonces en nuestro abordaje emocional o el de los niños y niñas de nuestro

    entorno enseguida podemos ver que ante un comportamiento disrruptivo

    por consecuencia unas emociones desreguladas. 

     

    Y aunque no siempre, muchas veces es por falta o exceso de una rutina clara. 

     

    Faltan horas de sueño, o sobran actividades. 

    Faltan espacios de calma, mirada y diálogo

    con papá y mamá o sobran pantallas.

    Faltan límites firmes para que la rutina

    se sostenga y desarrolle en armonía. 

      

    Cuando una familia llega a trabajar conmigo al menos en 2 de

    estos 3 temas nos ponemos a trabajar, y justamente porque se desajusta uno

    y los otros comienzan a entrecortarse.

     

    En este tiempo de vacaciones o reciente regreso a clases suele haber ajustes o

    desajustes en estos 3 pilares que para mí componen una buena parte de la crianza. 

     

    Hay familias que les viene muy bien para ordenarse y encontrar nuevos ritmos,

    nueva armonía, estar en calma. 

     

    Para muchas otras, ocurre todo lo contrario. Hay más desafíos,

    el no tener actividad escolar los super desordena en horarios, se pierden

    y mezclan los tiempos vitales: compartido, paralelo y privado.


    Por eso te quiero ofrecer el TRICOMBO DE CRIANZA con mis tres talleres grabados

    para ver a tu rirmo y cada uno con sus materiales de lectura y trabajo para empezar a ordenar

    por dónde sientas que es más necesario para tí y tu familia.



    Deseo que los disfrutes y luego me cuentes qué tal ha ido este combo de CRIAR Y VIVIR!

    TRI COMBO CRIANZA

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    y no de Educación Emocional.

    Porque las emociones no se pueden, y al menos yo no quiero, educarlas.


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    inteligentes emocionalmente. 

     

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    por consecuencia unas emociones desreguladas. 

     

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    Faltan espacios de calma, mirada y diálogo

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    Faltan límites firmes para que la rutina

    se sostenga y desarrolle en armonía. 

      

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    y los otros comienzan a entrecortarse.

     

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    desajustes en estos 3 pilares que para mí componen una buena parte de la crianza. 

     

    Hay familias que les viene muy bien para ordenarse y encontrar nuevos ritmos,

    nueva armonía, estar en calma. 

     

    Para muchas otras, ocurre todo lo contrario. Hay más desafíos,

    el no tener actividad escolar los super desordena en horarios, se pierden

    y mezclan los tiempos vitales: compartido, paralelo y privado.


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